Para la presentación de la colección primavera-verano 2024 de la firma Dior se convocó a la artista Isabella Ducrot (Nápoles, 1931), que creó una instalación monumental titulada Big Aura. El trabajo se compone de veintitrés vestidos, cada uno de cinco metros de alto, que se produjeron deliberadamente desproporcionados con respecto al cuerpo humano. 

Recordemos que "aura" se refiere a aquella luminosa radiación, normalmente imperceptible e impalpable que rodea a todos los seres (humanos, animales y plantas), como un halo capaz de reflejar el alma del individuo. Ahora, estrictamente desde el punto de vista del arte, según el pensador Walter Benjamin, se define el aura como: “la aparición irrepetible de una lejanía” y se aplica a todo aquello creado por un artista que no se ha reproducido, que es único. 

En este caso Big Aura representa ese destello que estos textiles gigantes emanan, como si pertenecieran a superhumanos, elevando a éstos, y a la vestimenta que llevan, a un nivel semi-divino. 

 

Big Aura, de Isabella Ducrot (detalle)

 

Big Aura, de Isabella Ducrot (detalle)

 

Los textiles de la instalación tienen como soporte un fondo de líneas entrecruzadas en blanco y negro. La imperfección de la base fue realizada adrede por la artista para provocar en el espectador la sensación de elaboración artesanal. Los cuadrados reflejan el entrecruzamiento entre dos líneas,  o entre dos elementos cuya intersección puede generar infinitas posibilidades.

Esta muestra, que arropó a la presentación de Dior, se realizó en un salón efímero en los jardines del Museo Rodin en París en enero de este año.