Hermanas...
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18/03/22 - Una piedra de St. Moritz se trasladó a otra ciudad Suiza, Gstaad, y se colocó frente a una estructura en aluminio de la misma forma y medida que la primera. Entre estos dos objetos se ubicó un espejo de dos caras que refleja a cada una de ellas e invita al visitante a formar parte de la instalación, retratándose junto a la piedra o a su doble en metal. La obra pertenece a Alicja Kwade (Polonia, 1979), que repitió el mismo procedimiento en St. Moritz llevando una piedra desde Gstaad. Como resultado no solo son hermanas las piedras enfrentadas entre sí, sino que también la misma obra se repite en otro espacio. Esta escultura monumental a cielo abierto tiene la ventaja formidable de un piso en color blanco (la temporada invernal siembra una base de nieve casi permanente) y si el día amanece soleado, el reflejo de la luz provoca destellos entre los espejos y el objeto de aluminio. Amerita moverse alrededor mirando hacia el espejo: en ese recorrido, el juego (siempre presente en el arte) entre ver la piedra y el objeto reflejado es algo así como jugar a las escondidas…
Big Be-Hide, de Alicja Kwade (2022)
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