Goya - Picasso – Dalí
14:16
21/01/18 - Un romántico, un moderno y un surrealista reunidos en el mismo lugar con un mismo tema: la tauromaquia. El Museo de Arte Español Enrique Larreta exhibe a tres de los nombres más relevantes en la historia del arte de España: Francisco de Goya (1746-1828), Salvador Dalí (1904-1989) y Pablo Picasso (1881-1973).
La muestra se desarrolla en tres salas, una para cada artista, en las que se exponen aguatintas y aguafuertes. El tema de la tauromaquia resulta hoy un tanto fuera de contexto, por la crueldad que implica hacia el animal, aunque los artistas se concentraron en representar la relación del hombre con el toro. Más allá del debate, las corridas de toros forman parte de la cultura y la tradición del pueblo español y es desde este punto de vista que vamos a contar la muestra.
Estampa N. 38E, Espanto y confusión en la defensa del chulo cogido, de Francisco de Goya
Serie Tauromaquia, 1818
Técnica: aguafuerte, aguatinta y punta seca / Medidas: 25.7 x 36.5 cm
Estampa N. 17, Palenque de los moros hecho con burros para defenderse del toro embolado, de Francisco de Goya
Serie Tauromaquia, 1818
Técnica: aguafuerte, aguatinta y punta seca / Medidas: 24.5 x 35 cm
Comenzamos con Goya, que fue un experto en retratar gestos y conductas humanas, no sin una crítica social escondida. Las pequeñas aguafuertes representan un instante determinado: cuando el animal se rebela al hombre y se anticipa un final trágico. La cartela explica que estos grabados, en particular, son recuerdos concretos de corridas presenciadas por el artista.
Tauromaquia en el cajón, de Salvador Dalí (1966) - Serie Tauromaquia Surrealista
Técnica: heliograbados trabajados en punta seca y coloreados a mano con stencil / Medidas: 31.8 x 41.2 cm
Los Molinos, de Salvador Dalí (1966) - Serie Tauromaquia Surrealista
Técnica: heliograbados trabajados en punta seca y coloreados a mano con stencil.
En el caso de Dalí, el artista apela a la intertextualidad y recrea grabados de Picasso (que no están en la muestra) con un tono crítico. En "Los Molinos" se refiere a la estampa picassiana "El torero sale en hombros de los aficionados" de 1957 reemplazando al torero por un esqueleto. Agrega además guadañas y cruces en clara alusión a la muerte.
La estampa "Tauromaquia en el cajón" está basada en el aguatinta de Picasso "Toreando a la Verónica", de 1957. Los toreros de la izquierda fueron reemplazados por peces que observan al hombre en acción. Sobre el fondo aparece un cajón como cabeza de un individuo sentado en las gradas.
Del álbum de dibujos realizados en Vallauris, de Pablo Picasso (1961)
Técnica: aguatinta / Medidas: 30 x 43 cm
Alceando a un toro, de Pablo Picasso (1957)
Técnica: aguatinta / Medidas: 20 x 30 cm
Corrida, 17 de mayo de 1951, de Pablo Picasso
Técnica: aguafuerte / Medidas: 41 x 54.5 cm
Es sabido que Pablo Picasso frecuentaba las plazas de toros desde niño y quizás es por eso que, a lo largo de su carrera, la figura del toro se convirtió en parte esencial de su obra. Se ha dicho que veía al duelo del hombre con el toro como una imagen cargada de simbolismos, un enfrentamiento entre fuerzas opuestas.
El trazo ágil y la figura estilizada son fácilmente reconocibles. Sin embargo, en sus aguatintas Picasso tiene algo de Goya. Quizás quiso homenajearlo, así como Dalí reinterpretó el trabajo del maestro de la modernidad bajo la mirada del universo surrealista.
0 comments