Museo de L'Orangerie... (Part II)

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Continuamos con esta recorrida por la Colección Jean Walter y Paul Guillaume, desplegada en el segundo subsuelo de L'Orangerie de París y que refleja, como toda colección de arte, ciertas características de la personalidad del coleccionista. 
Guillaume, el iniciador de la misma, fue un conocedor del arte, amante de la cultura clásica, aunque abierto a los nuevos talentos de la París de principios del siglo XX, como Modigliani,  por ejemplo. Aceptó las innovaciones en pintores establecidos, como fue el caso de Cezanne,  y se animó a incluir una mujer, Marie Laurencin.
Danseuses espagnoles, de Marie Laurencin (1920-1921)
Técnica: óleo sobre tela
Musée de L'Orangerie - París
Femmes au chien, de Marie Laurencin (1924-1925)
Técnica: óleo sobre tela
Musée de L'Orangerie - París
Conocida como la “musa de los cubistas” y románticamente ligada al poeta Apollinaire, Marie Laurencin (Francia, 1883-1956) pasa de una paleta de colores intensos a una de grises y rosas a partir de 1910.  Para ese entonces también descubre a Goya y en 1920 comienza a pintar personajes femeninos, esbeltos y vaporosos, renegando del clasicismo para desarrollar nuevas formas de representación.
Como Laurencin, Amedeo Modigliani también compartía sus mismos intereses en cuestiones de pintura y ambos formaban parte del movimiento primitivista de la pintura moderna. Modigliani (1884-1920) vivió muy poco tiempo, por eso su obra, que es de una gran coherencia plástica, se desarrolla en tan sólo doce años. Paul Guillaume fue su mentor y quien influyó para que dejase la escultura y se dedicara a la pintura. Llega a producir un centenar de cuadros y todos con una única figura humana.
Le Jeune apprenti, de Amedeo Modigliani (1918-1919)
Técnica: óleo sobre tela
Musée de L'Orangerie - París
Paul Guillaume, Novo Pilota, de Amedeo Modigliani (1915)
Técnica: óleo sobre tela
Musée de L'Orangerie - París
La relación entre Paul Guillaume y Henri Matisse (Francia, 1869-1954) fue siempre distante, aunque le compró sus obras durante veinticinco años. Domenica, la esposa de Guillaume, sólo mantuvo diez de ellas.
Femme á la mandoline, de Henri Matisse (1921-1922)
Técnica: óleo sobre tela
Musée de L'Orangerie - París
Odalisca á la culotte rouge, de Henri Matisse (1924-1925)
Técnica: óleo sobre tela
Musée de L'Orangerie - París
Para el final dejamos a Paul Cézanne (1839-1906), “nuestro padre de todos”, como lo llamaba Picasso. Fue el precursor de la pintura moderna y los jóvenes pintores lo reverenciaban. La exigencia y originalidad de su enfoque, su sentido del volumen y la importancia que le daba a la geometría en su obra hacen que cualquier colección que tenga un Cézanne se valorice. A pesar de ser un artista establecido, Guillaume lo incorpora a su colección por su talento y su sentido de la innovación.
Le Déjeuner sur l’herbe, de Paul Cézanne (1876-1877)
Técnica: óleo sobre tela
Musée de L'Orangerie - París
Portrait de Madame Cézanne, de Paul Cézanne (1890)
Técnica: óleo sobre tela
Musée de L'Orangerie - París
La Rocher rouge, de Paul Cézanne (1895)
Técnica: óleo sobre tela
Musée de L'Orangerie - París
Definitivamente es éste un paseo imperdible en el corazón de París. Un único inconveniente: siempre hay una fila de más de media hora, debido a la poca capacidad para visitantes.

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