Arte Urbano...

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Shoreditch es un barrio de Londres cuyas paredes fueron apropiadas por los graffiteros. Si bien estas intervenciones en las paredes urbanas eran consideradas vandalismo, hoy en día despiertan admiración y respeto como un particular género de expresión.
Tiempo atrás Shoreditch estaba ocupada por pequeñas industrias que, en los noventa, abandonaron el área dejando vacíos cientos de depósitos. La zona se convirtió en talleres y viviendas de artistas emergentes. Como era de esperarse, estos artistas jóvenes y provocativos se adueñaron de las paredes.

Una situación que el pensador Gianni Vattimo había profetizado en los setenta, según él el arte ya no existiría como fenómeno específico, sino como una estetización general de la existencia. Todo sería invadido por imágenes a partir de una explosión de la estética fuera de los límites institucionales que había fijado la tradición.

Es así que hoy no es necesario visitar un museo o una galería de arte para ver una obra: vivimos experiencias visuales de forma inmediata, en la calle, en los medios gráficos, en las redes sociales.

Shoreditch es el ejemplo vivo de ello. Estas pintadas son monumentales, detalladas, exquisitas, un deleite para el peatón, pero sólo algunas de ellas están protegidas por ser emblemáticas para la ciudad. Las demás se perderán cuando otro graffitero ocupe el lugar con una nueva pintada.