Marlene Dumas en el Palazzo Grassi, Venecia.

15:05

He pintado más mujeres que hombres.

Pinto mujeres por hombres.

Pinto mujeres por mujeres.

Pinto las mujeres de mis hombres.

Marlene Dumas, 1997

08/06/22 - Open-end se titula la muestra en la que Marlene Dumas exhibe más de cien trabajos en los dos pisos del magnífico Palazzo Grassi en Venecia. Los dibujos y las pinturas van desde 1984 hasta este año, algunos de ellos nunca vistos. Pero aquellos que ya conocíamos, como los que pertenecen a la serie de Myths & Mortals, con figuras que aparecen fragmentadas un solo ojo, un par de labios o un acercamiento a un beso, son extraordinarios. Entre éstos hay un retrato de Dora Maar, recordada por su desafortunada relación con Pablo Picasso y a la que él mismo pintó como una mujer quebrada emocionalmente. Dumas, en cambio, revierte la situación y describe a Maar como un ser fuerte que vio llorar a Picasso (según el título que agrega la artista al retrato).

Dora Maar (The Woman who saw Picasso cry), de Marlene Dumas (2008)

Medidas: 80 x 60 cm

En otra referencia a Picasso, Marlene nos muestra unas agiornadas Les Demoiselles d’Avignon (1907), en la que las jóvenes aparecen de espaldas al observador, localizándolo detrás del “espectáculo”. Entonces nosotros, como espectadores, participamos de lo que está ocurriendo, observando no solo a las mujeres sino a la ventana iluminada en el fondo de la pintura. Todos (nosotros, las jóvenes y el supuesto voyeur) formamos parte de este escenario donde se está esperando a un “cliente” o “visitante”.

The Visitor, de Marlene Dumas (1995)

Técnica: óleo sobre tela / Medidas: 180 x 300 cm

Un fondo oscuro se eligió para una pintura casi en tamaño natural en la que una mujer desnuda y arrodillada tiene las manos en su propio cuello. Así representa Dumas a Stuck de la no sabemos nada y menos sabemos qué está ocurriendo fuera del marco.

Stuck, de Marlene Dumas (2017)

Técnica: óleo sobre tela / Medidas: 175 x 87 cm

Bride, por otra parte, fascina a Dumas quizás no como una novia sino como una Salomé con un velo bailando una danza erótica, o como una momia egipcia o cualquier otra interpretación que queramos darle. Como sea, se trata de una de las imágenes más fotografiadas de la artista.

Bride, de Marlene Dumas (2018)

Medidas: 300 x 100 cm

Terminamos el recorrido por esta muestra, que es un -deber ver- si se visita la Bienal de Venecia, con Lips: labios carnosos y eróticos surgen de un rostro con piel en color verdoso. El verde contrasta con el rojo y hace lucir a esta boca sensual, tal como si se tratara del recorte de un aviso comercial de lápiz labial de los años sesenta.