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Gyula Kosice

07/11/16 - Un día vamos a ver una ciudad hidroespacial en un punto  de la galaxia y alguien recordará que Gyula Kosice (1924-2016) ya la había imaginado en el siglo XX. Este artista, que cruzó los límites del arte, incorporando ciencia y tecnología a sus obras, es homenajeado en el Bellas Artes de Buenos Aires. Su gran amigo y curador de la muestra, Rodrigo Alonso, descubre las obras menos conocidas. Son  veinte piezas de distintos momentos,  en su mayoría pertenecen al acervo del museo, pero no se exhiben habitualmente. La muestra, titulada "Homenaje", no estaba en la programación de la temporada pero la muerte del artista, ocurrida en mayo último, fue el desencadenante.

Vista general de "Homenaje" - Gyula Kosyce

Bellas Artes - Noviembre 2016

La gran aventura de Kosice fue darle movilidad al arte concreto, ese movimiento de inicios del siglo XX que impugnaba el ilusionismo de la representación pictórica. En 1946, cuando funda la agrupación Arte Madí, realiza individualmente obras con tubos de neón y, en 1948, incluye motores y acrílico en sus piezas. Desde 1950 las esculturas hidrocinéticas se convierten en una obsesión: buscaba la manera de modular el agua. Más tarde suma sonido, luces y tecnología digital, siempre con la intención de expandir los límites del arte.

Aerolito, de Gyula Kosice (1970)

Materiales: plexiglas y luz fluorescente / Medidas: 58 x 58 x 30 cm

Colección Museo Kosice

Relieve lumínico Color-Aire, de Gyula Kosice (1970)

Materiales: acrílico, plexiglas, luz, aire / Medidas: 70 x 50 x 15 cm

Colección Museo Kosice

Kosice fue un artista experimental y ésta es una muestra que se le debía en vida,  ya que no expuso individualmente en el museo por más de veinte años.