24/12/15 - El arte, reflejo de la vida, representa todos los momentos y todas las historias de los hombres. Lo vemos, por ejemplo, en esta obra de Jan Havicksz Steen (Países Bajos, 1626-1679). Steen fue un artista que incorporó en sus pinturas los elementos de las fiestas populares de su tierra. En "TheFeast of St Nicholas" nos muestra la llegada de San Nicolás. La pintura representa  a los niños buenos y a los no tanto. Aquellos que fueron obedientes, como la pequeña en primer plano, reciben regalos. Los traviesos, como el joven sobre la izquierda, sólo reciben un manojo de leña.

The Feast of St Nicholas, de Jan Havicksz Steen (1665-1668)

Rijksmuseum - Países Bajos

Paul Gauguin, durante su estadía en la Polinesia Francesa, reflejó la vida de los habitantes en todos sus aspectos. Con el nacimiento de un niño pretendió representar la llegada del Niño Jesús. Esta obra tan particular permaneció alejada de la luz pública por cincuenta años y ahora se puede ver en la Fundación Beyeler, el espacio que alberga la colección de Hildy y Ernest Beyeler, cerca de Basilea en Suiza.

Nativité, de Paul Gauguin (1902)

Técnica: óleo sobre tela

Fundación Beyeler

También el arte fue recurso   para educar a los hombres en la religión. Tintoretto (Venecia, 1518 – 1594), en su obra "Natividad", representa la llegada de Jesús. Todos los detalles de la pintura fueron tomados por el artista de fuentes iconográficas no oficiales, ya que el nacimiento es mencionado brevemente en la Biblia.

La Virgen, sobre un colchón de heno, contempla al Niño recostado en un paño azul. San José los ilumina con una antorcha y mira hacia la  derecha de la obra donde se encuentran dos mujeres. Toda la escena se desarrolla en el interior de un establo, bajo el cielo de la noche.

Natividad, de Jacobo Robusti (Tintoretto) ca. 1585/1594

Técnica: óleo sobre tela / Medidas: 111 x 80 cm

MNBA

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Para seguir leyendo... "Comentario sobreNatividad", de Alejo Lo Russo