En una feria de arte las piezas que se exhiben son sencillas y fáciles de asimilar, es como una especie de paseo donde prima lo visual. Las bienales o, como en este caso trienales, pretenden ser una experiencia diferente, pues los artistas presentan  más arriesgadas,  oscilando entre lo violento y lo encriptado, además de comprometidas con la actualidad social. La trienal Surround Audience en el New Museum of Modern Art de New York pretende explorar los efectos sobre el ser humano de un mundo altamente conectado a la tecnología.

Freedom (Libertad), de Josh Kline (2015)

Instalación

The New Museum of Modern Art

La pieza que antecede, quizás la estrella de esta presentación, usa un discurso político y social para producir un efecto desgarrador. La instalación pretende demostrar cómo la humanidad se fue transformando en comodities y en instrumentos de las sociedades neoliberales. Examina los regímenes de control a los cuales  son sometidos los individuos una especie de vigilancia continua que realizan, en este caso, unos policías con un vestuario de alta tecnología, que parecen Telettubies.

SOHO (Substances of Human Origin), de Aleksandra Domanovic (2015)

Instalación - Materiales varios. 

New Museum of Modern Art

Varias obras representan las transformaciones en el cuerpo humano por el avance de la tecnología. Tal es el caso de la instalación presentada por Aleksandra Domanovic (Yugoslavia, 1981), una artista que se interesó por el trabajo del científico Rajko Tomovic, creador en Belgrado de una de las primeras prótesis artificiales de manos con sensibilidad, para soldados que habían perdido dichos miembros en la guerra. Las esculturas que forman parte de la instalación fueron hechas con una impresora 3D derivadas del modelo de la mano de Tomovic. Sin embargo, los órganos, tejidos y células para el trasplante son sustancias de origen humano, que fueron transformadas. Para acercarse a las manos se debe pasar a través de una cortina transparente que, de un lado y de otro, modifica la imagen de  dichas células humanas.

Distant Feel, de Antoine Catala (2015)

Materiales varios.

Otro de los temas recurrentes en esta exhibiciones es la conservación de aquello que está siendo destruido por la mano del hombre. En esta obra, la artista francesa Antoine Catala crea un símbolo para el término "empatía": dos letras E enfrentadas. Pretende ser una campaña publicitaria vendiendo un sentimiento. Según la artista, el avance de la tecnología ha hecho que el hombre pierda la sensibilidad por el resto de los seres. Las dos letras están sumergidas en un estanque y su forma está cubierta con corales que viven y crecen allí mismo, como un símbolo de volver a la vida.
Esta  trienal fue sumamente criticada por no lograr cumplir el objetivo que propone en un ciento por ciento. Se esperaba más tecnología en la factura de las obras, por ejemplo. El mismo avance de la tecnología que tanto se cuestiona, pero a disposición de las obras en sí.