Escultura: Curatella - Bairon - Cattelan
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Un artista del siglo XX se enfrenta con dos
del siglo XXI para poner en evidencia los cambios que las figuras y los temas experimentan a
través del tiempo.
Los acróbatas, de Pablo Curatella
Manes (1923)
Materiales: yeso / Medidas: 268 x 127 x 85 cm - MNBA
Los acróbatas, inspirada en un
espectáculo de circo, es la obra que lleva a Curatela Manes (Argentina, 1891-1962) a investigar nuevos
horizontes sobre la posibilidad de aligerar la materia. Es justamente en el año
de la creación de esta pieza, 1923, cuando se produce un quiebre en su
producción. A partir de aquí se dirigirá cada vez más hacia la abstracción, inspirado por el cubismo y el futurismo. Pero, sobre todo, su interés estará
centrado en la liviandad, a tal punto que a su siguiente obra la llamará Icaro.
Sin
título, de Elba Bairon
Técnica: Instalación en yeso / MALBA 2013 (detalle)
Bairon (La Paz, Bolivia 1967) prefiere
las formas puras y con volumen. “Al hacer y pensar estas figuras –cuenta la
artista- me vi de pronto elaborando unas manos que no quería que fuesen manos
sino la evocación remota de unas manos. Sentí que abordaba la figura, la trataba
y la investigaba para disolverla.” Esta manera de trabajar nos permite,
entonces, enfrentarnos a ciertas piezas complejas en el mensaje pero no tanto a la mirada, gracias a este sútil
movimiento que tienen, resultado de su destreza. Con un aire eterno y fantasmal, la pieza de la foto nos evoca quietud y es una de las tantas que forman parte
de la instalación, que no lleva nombre y que se despliega en la planta baja del
MALBA.
Por último Maurizio Cattelan (Italia, 1960) despliega varias figuras cubiertas sobre el piso y nos enfrenta cara a cara con la
muerte. Pero esta instalación pesada en mármol, no solo incomoda al espectador.
Esta chocante obra de arte es un problema para todo el mundo artístico pues no es fácil de exponer y, por sobre todo, incomoda a los que lucran con las obras de este artista ya que no es una
producción gentil para que un coleccionista pueda convivir con ella.
En resumen, Curatella Manes desafía a la ley de la
gravedad, Bairon llega con su obra al punto máximo entre la representación de
una figura y una masa informe y Cattelan
desafía al espectador.
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